Teniendo en cuenta los beneficios del consumo de carne de res, es necesario plantear modelos de ganadería sostenible que velen por el medio ambiente y le permitan a las personas obtener todos los nutrientes de carne de calidad sin pensar en su impacto en el mundo.
Los beneficios de comer carne de res están más que demostrados. No solo aporta entre un 18 y un 20 por ciento de las proteínas necesarias para el desarrollo óptimo de las funciones de tu organismo, también es un alimento rico en zinc, hierro, magnesio, potasio, aminoácidos y vitaminas B1, B2, B3 B12 y B6. Según la vicepresidenta del Colegio Colombiano de Nutricionistas Dietistas – COLNUD, Ana María Ángel, “entre los beneficios relevantes se encuentra que influye en el sistema inmunitario, en la cicatrización y metabolismo de carbohidratos. Las proteínas de alto valor nutricional contenidas en la carne de res ayudan al aumento de masa muscular y otros tejidos que inciden en el crecimiento y desarrollo del individuo”.
Gracias a esta serie de beneficios, sumados a muchos más, la necesidad de un modelo de ganadería sostenible era necesario. La iniciativa, diseñada entre la Federación Colombiana de Ganaderos (FEDEGAN-FNG), el Centro para la Investigación en Sistemas Sostenibles de Producción Agropecuaria (Cipav), el Fondo para la Acción Ambiental y la Niñez (Fondo Acción) y The Nature Conservancy (TNC), el proyecto es cofinanciado con aportes de donación del Fondo Mundial para el Medio Ambiente (GEF), administrados por el Banco Mundial (BM), y con aportes financieros y en especie de los cuatro aliados, busca crear un modelo que responda ante la creciente demanda de una manera sostenible y amigable con el medio ambiente.
Con el uso de diferentes de árboles integrados a la producción ganadera, además de la conservación de bosque nativo de las regiones, el proyecto beneficiará a dos mil familias que se dedican a esta industria y que están distribuidas en 83 municipios en cinco zonas del territorio nacional.
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), “el crecimiento demográfico, el aumento de la riqueza y la urbanización se están traduciendo en una mayor demanda de productos ganaderos, en particular en los países en desarrollo. La demanda mundial se prevé que aumente en 70 por ciento para alimentar a una población que se estima alcance 9.600 millones de personas en 2050”.
Ante este aumento de la demanda, es necesario que proyectos como los que está liderando FEDEGAN logren un gran impacto. Dentro de las metas que propone esta iniciativa se encuentran 50.500 hectáreas de praderas degradadas que serán transformadas en sistemas de producción, también plantea una mejora de la diversidad biológica de importancia global en las zonas intervenidas gracias al incremento del Índice de Servicios Ambientales, producto de la implementación de Sistemas Silvopastoriles (SSP) amigables con el medio ambiente en las zonas involucradas.
Así mismo, la FAO proporciona evaluaciones completas sobre la ganadería sostenible como la Agenda global para la ganadería sostenible o la Alianza sobre evaluación ambiental y desempeño ecológico de la ganadería (LEAP), estos documentos están llenos de información valiosa sobre los modelos amigables con el medio ambiente y cómo pueden ser aplicados.
Teniendo en cuenta que los efectos positivos de la industria ganadera sobre la seguridad alimentaria y la reducción de la pobreza, las políticas o estrategias que busquen un menor impacto climático son de vital importancia para la evolución de ganadería en el país y el mundo.
La reducción de la erosión del suelo, los mecanismos de Pagos por Servicios Ambientales (PSA), la asistencia técnica y el acceso a créditos son los primeros pasos para que todos los colombianos puedan seguir disfrutando de los beneficios de la carne de res sin tener que pensar en el impacto ambiental. Este es el futuro de la industria ganadera.